Por Get In / Foto por Get In
24 de marzo de 2015
Pablo Alborán ya ha cruzado el ecuador del ‘Tour
Terral’ latinoamericano con el listón cada día más alto. Tras el apoteósico
éxito conseguido en el legendario Luna Park de Buenos Aires, y después de
colgar el cartel de ‘No quedan entradas’ en Bogotá, Lima, Santiago de Chile y
Viña del Mar, el cantante español llega a la capital uruguaya colgando también
allí el cartel de sold-out. Su gira
está resultando histórica e inolvidable.
Pablo llegaba a Argentina con buenos
presagios. El álbum Terral ya era
Disco de Oro en aquel país y la expectación era máxima. Era previsible que su
concierto en el Luna Park fuera tan emotivo como intenso. Ante más de 5.000
personas, todas entregadas al máximo, participando y coreando cada una de sus
composiciones, Pablo fue presentando su último álbum, Terral, alternando sus canciones, como siempre, con éxitos de sus
anteriores discos.
Los conciertos de Pablo son intensos, sí,
emocionantes, también, pero quien crea que también son previsibles se equivoca.
En el comienzo de sus recitales suele interpretar algunas de las canciones más
impactantes de su último disco (La
Escalera, Pasos de Cero…).
También se alternan esas canciones con otras de sus anteriores discos. Pero lo
que el público bonaerense no podía adivinar era el estreno de una composición
de Pablo que todavía nadie había escuchado. Hacia la mitad del concierto, el
cantante malagueño presentó una composición inédita, un tango titulado Entre Un Compás, compuesto por él y
reservado expresamente para dicha ocasión. La emoción del público alcanzó
entonces el clímax. Pablo siempre parece tener una carta en la manga pero esos
son secretos que guarda celosamente. Nadie lo podía imaginar.
Ya, hacia el final, con canciones como Solamente Tú y Gracias, la emoción contagió a público y músico. Fue el no-va-más
de un concierto que los asistentes no están dispuestos a olvidar. Mientras unos
(y unas) cantaban las canciones, Pablo prácticamente no podía cantar y se
tapaba los ojos mientras sus estribillos invadían el recinto. Eran minutos de
una emoción difícilmente descriptible. Un broche de oro que nadie va a olvidar.
Pablo Alborán sigue poniéndose el listón
cada vez más alto y siempre nos sorprende. Y mientras, el ‘Tour Terral’ continúa.
Fueron más de dos horas intensas de canciones y emociones en Buenos Aires. Y
Montevideo es la próxima cita. Seguramente será otra película para no olvidar.
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